Desde el 30 de mayo hasta el 2 de este Julio se celebró en Guadarrama el Memorial a Vicente Borondo-sensei.
En el memorial, en el cual hubo pases de vídeos de las enseñanzas de Vicente y repaso de algunas memorias que ha nos ha dejado así como práctica de Shinto Muso Ryu e incluso un poco de caligrafía, fue gratamente acompañada de Maestros y otros participantes de ultramar, venidos de Italia, Suiza e incluso Japón mismo.
El curso empezó como estaba planeado la tarde del jueves con practica de Kenjutsu, poniendo especial énfasis en los principios y cortes básicos, que se trabajaron en profundidad. Bajo supervisión directa de Pascal Krieger-sensei, se pulieron en la medida de lo posible los fundamentos del Kenjutsu asociado a SMR. Finalmente, para terminar, se practicó la serie de Omote de Jojutsu.

Tras una breve cena, un rato de charla en un bar y una noche de descanso, empezó el primer día completo del curso.
Bajo el generoso sol de la meseta practicamos parte del Kihon en solitario y a continuación hubo un repaso breve de las dos siguientes series de Jojutsu: Chudan y Ranai. A parte, los practicantes que todavía se encontraban en Omote practicaron con Pascal-sensei el Kihon. A continuación y durante el resto de la mañana, los practicantes de más nivel seguirían con la serie de Kage mientras que el resto se uniría a Pascal-sensei en repasar las técnicas básicas.

Tras una animada comida hubo una breve sesión de caligrafía. En ella, Fernando-sensei propuso un par de ejercicios libres para los cuales tuvimos el privilegio de poder pedirle corrección a Maria-Rosa-sensei. Tras esa corta sesión empezó el Keiko de la tarde. En este se volvió a poner el foco en el manejo de la espada, esta vez usando como motor el Shinto Ryu Kenjutsu, la tradición de Kenjutsu propia de Shinto Muso Ryu. Tras un rato largo de práctica de las 12 técnicas, propuso Adrian-sensei el estudio de un movimiento de Kendo especialmente práctico para cierto movimiento de deflexión en la 8ª técnica de la serie, Surikomi, donde el movimiento se puede potenciar de forma interesante añadiendo un golpe de muñeca. Hacia el final del entreno, se liberó de la práctica del Kenjutsu a los practicantes de más nivel para poder practicar también otras armas paralelas de Shinto Muso Ryu.
Tras finalizar el entreno y otra breve cena, se hizo una proyección de una recopilación de grabaciones de Vicente-sensei donde pudimos recordar sus enseñanzas a la vez que su forma de enseñar. Desde técnicas del Kihon hasta movimientos de Chudan, fue refrescante poder ver en color y en pantalla sus correcciones a nuestros errores y los movimientos que nos enseño, otra vez más.

A continuación, los más intrépidos practicantes de caligrafía seguimos practicando los ejercicios libres propuestos por Fernando-sensei y algunas correcciones propuestas por Maria-Rosa-sensei
La mañana siguiente, sobre el rocío todavía fresco, repasamos los Uchikomis y parte del Kihon de forma individual. Tras el repaso, se llevo a cabo la practica de Uchida Ryu Tanjojutsu, aunque posteriormente los practicantes de más nivel pasarían también o otras armas paralelas y los de menos volvimos a repasar otras técnicas de Jojutsu.
Tras el Keiko matutino y otra agradable comida en grupo, se hizo otra sesión de caligrafía. En esta estuvimos acompañados por Pascal-sensei, que nos deleito con sus escrituras y hizo una interesante explicación sobre los curiosos orígenes de algunos de los caracteres del alfabeto chino, elemento fundamental en el sistema de escritura japonés (y por ende, de la caligrafía japonesa).

A continuación, empezó el último entrenamiento de la tarde, en el cual los practicantes más avanzados pudieron practicar técnicas más avanzadas mientras los iniciados pudieron seguir mejorando las técnicas más básicas. Los que quedamos en medio tuvimos el privilegio de repasar Chudan con extremo detalle con Lorenzo-sensei, quien se aseguro de corregirnos hasta el más minucioso de los detalles. Adicionalmente, también nos propuso varios ejercicios para poder comprender algunos de los principios tras ciertos movimientos, por ejemplo la comprensión en profundidad de las distancias y como podemos cerrarlas.

Tras la última cena, en la cual Javi-senpai nos invito a unas deliciosas croquetas, se volvió a proyectar otra compilación audiovisual de Vicente-sensei practicando Shinto Muso Ryu, sin embargo, en vez de sus enseñanzas verbales, esta vez visualizamos Embus de las series de Omote, Chudan y, por terminar, Kage, su favorita. Tras la visualización del audiovisual, varios de los asistentes salieron también a contar anécdotas que tuvieron con Vicente-sensei y también aprovecharon para dedicar algunas palabras.
A continuación se hizo la última sesión de caligrafia, donde pudimos aplicar las correcciones y ejemplos dados por Pascal-sensei durante el medio día, antes de despedirnos entre nosotros mientras lavábamos los pinceles.

Al día siguiente, tras el último desayuno, empezamos haciendo, los que teníamos el grado adecuado, Ranai cambiando libremente partes de la técnica. Si bien el resultado fue en algunos casos un poco más Ran (caos) que Ai (armonia) fue interesante el intento de interiorizar las técnicas para que salieran a reacción del oponente en vez de siguiendo la secuencia que dicta la Kata. A continuación se siguieron enseñando técnicas más avanzadas a los practicantes de rango más avanzado y se dio práctica libre por parejas al resto, bajo la supervisión de todos los instructores que no estaban asistiendo a los practicantes avanzados. En la última porción de la sesión, Pascal-sensei aprovecho para enseñar a aquellos que no habíamos tenido la oportunidad todavía alguna técnica nueva, para poder seguir progresando y tener un buen concepto de dicha técnica para la práctica las semanas o meses venideros en los Dojo de cada uno.

Terminada la sesión y desalojada ya la habitación donde nos hospedamos, llego la hora de las primeras despedidas, pues siendo domingo por la tarde a muchos nos tocaba ya volver a nuestras tierras. Si bien hubo una comida posteriormente, el equipo de Barcelona tuvo que dejar la comitiva tras las sacudidas de manos, abrazos y preguntas de quien vendría al próximo Gasshuku Europeo.
